jueves, 10 de noviembre de 2016

viernes, 4 de noviembre de 2016

MORRIÑA

el pie de la niñez dejó su surco encima de la arena, su relieve
de castillos hacia dentro,
un íntimo concierto en cada concha /abismal
toda la respiración del mar sobre la arena —el pie
escuchando aquí: 

mis ojos reconocen ese mar lo esconde:
hay lágrimas que mojan hacia dentro, 
como una concha abandonada retorciéndose en lo inmóvil:
silencio espiral de soledades   caes y
nadie/

nadie escucha la escafandra de mí mismo en estas manos:
yo tampoco/ soy tan nadie como todos —me dejé lejos:
playa vacía de reencuentro.

¿qué rumbo de juego quiso dibujar aquel pie mientras volaba cometas de papel al aire?
¿qué sonrisa de música y de ola te devuelve desde ti a ti mism@? 
¿qué memoria de tus pasos irás a visitar?

el agua    se agranda     el ahogo   es lento pero aquí.

aun con esa asfixia he de volver /besar la arena
tragarla como el primer llanto
—enterrarme en esa sal 
pisarla como el primer vértigo 
—rebozarme en ese grito de honda paz si no hay resaca
y no volver a hacerme guerra con el miedo
avanzar de salto a salto entre columpios de futuro 
y ola a ola
desdibujarme el grito/ con el agua hacer ínfimo camino, ser orilla.

hay una concha encima de la huella de mi pie
/dentro duerme un niño
A mi regreso,
¿en qué música hablará tras tantos años de asesinato y de sordera?
¿aún tendrá voz propia o será como los huesos yermos que sostengo en el espejo?






jueves, 20 de octubre de 2016

Pedazos de la lluvia

he roto algún desierto    abarrotado de fulgor 
he roto las ventanas:

la lluvia quiere devolverme un animal

un cristal herido mira su propia transparencia
un hilo que se aplasta
el mundo en mí
desde el cielo de la angustia ojos o canicas 
rotas /plaf pedazo y gota de un pedazo y una astilla

me estoy viendo llover:
soy un pedazo de mi cuerpo
entre tu piel /la despedida tiene algo de humedad
las piedras se me enferman
—yo no sé ser muro,
me desprendo: lluevo
para enfermarme las distancias—

he roto con las manos cada luz en mí que
nunca he roto en nadie,
soy una gota deslizándose en tu muro de suicidios:

no soy sino pedazos.

¿quién me ha quebrado el hueso
la defensa el grito de gritarte "no me quiebres"?
¿quién sino yo un trapo herido
sucio ajado el polvo inútil de toda esta inocencia?
Todo alrededor es muro 
/yo no quiero defenderme:
no sé dónde posar ningún encuentro, 
me desprendo yo no sé ser muro
¿en qué nido posar esta tormenta si en las manos no me cabe?

no soy sino pedazos.
vivir arranca el hueso de la risa/ 
ya no hay bocas para el agua
ya no música de charcos en tus pies
ya no el silencio del almendro
naciendo aquí donde la boca
este pedazo des.membrado

no soy sino el verbo de la ausencia /todo es muro
y mis manos también se han hecho jaula
extinguiéndose la tierra de puro desprenderse.




domingo, 9 de octubre de 2016

La siembra


"mi cuerpo mudo
se abre
a la delicada urgencia del rocío"
Alejandra Pizarnik

una flor 
regresa a la semilla de su miedo: la mano
cerrada deshinchada lejos ya tan lejos
la caricia

una flor /mi mano niña sujetando
el miedo: mi cuerpo mudo en descomposición
entre la mano niña, el niño caminando
y el rastro de ceniza como ceniza encima del otoño


tú tienes otra flor y otro camino y el miedo oculta con nieve nuestras huellas.
los ojos se nos cierran como embalses de vacío, la flor
pequeña como sed inagotable tanto miedo
tanto miedo de tu miedo todo el miedo

pero yo repito las palabras para fabricar saliva
y regar como quien riega la esperanza:
en la tierra del quizás quizás rebrota
tu mano tapándome la boca 
haciéndome el rocío en los pétalos cansados de mi cuerpo.




sábado, 8 de octubre de 2016

Crisálida

"— ¿Muerto?
— Más allá de toda resurrección."
Kenny


todo lo naciente es un temblor: mis manos, como gotas
sujetan siempre una crisálida
/se hinchan de luciérnaga y rompen la piel de tu quiescencia:

caminaste/ me dijiste ponte en marcha
apaga la luz y ven viaja —ya me basta con tu luz— dentro 
de mi bosque

/es el bosque el que nos cruza. también 
la flecha de la noche atravesando
—ya no brilles, no hace falta—

es el silencio el que nos cruza,
algún día podríamos ser árboles de noche, ardiendo
como arden mariposas que aún no nacen
pero están

naciendo como un temblor sin ojos en los árboles
/el amor no necesita ojos para hinchar la luna cuando 
ese mar avanza y el árbol crece
y las hojas caen como las gotas de mis manos en tus manos
mariposas. 



jueves, 15 de septiembre de 2016

buceo

yo siempre te he leído desde el fondo:
un mar donde sí puedo... saber que sé la herida
saber que aún sé

abrir la sal como en tu boca haciéndome saliva aliento
donde aún sea posible deshabitar el hueco
el hueco /aún no sus imposibles

/yo siempre te leo desde el fondo y aún más cerca
más cerca

abrir las palmas y aprender a utilizarlas
/hacer cueva con ellas:
nuestras voces siendo cuenco donde la sopa del dolor
huela a otra cosa a reflejo habitado
en ti este mar
¿en mí?
que leas mi pozo hogareño de amor con tu lengua

y me abras —la boca
el sadismo del silencio 
y mi ceguera

ábreme la carne con las yemas para extinguir ausencias
extinguir tanto vacío
mojar palabras haciéndonos tormenta
hacernos charco espejo y más temblor
la luz posando sus texturas inasibles en los zafiros que se abren en tu rostro

me miras —"de cerca me miras"—
las afiladas hojas de otoño de horizonte caen aquí
la piel muy dentro abierta
y sangro
me desprendo
despacio me hundo —te leo— despacio me acerco
un pájaro después del mar me habita me agranda hasta lo ínfimo
y vuela   —donde dejaste tus palmas tan abiertas como cuevas— allí vuela 
aterriza y aún 
bucea. 


lunes, 29 de agosto de 2016

DÍVKA A VLAK // NIÑA Y TREN

(mi primer poema traducido a otro idioma; gracias a Pavel —alumno de mis clases de conversación de español— por la traducción)

*******************

Dívá se jak vlak projíždí aníž by ho čekala
v jejích očích se zračí
krajina - světlo smáčí tajemno
vítr - stín s pískotem těch na věčnosti
a vzduch - údiv v němž pulzuje prázdnota

mezitím ubíhají dny, běží
s lhostejností k zapomenutým snům
jež zapomínáme (vlaky které projíždí a mizí)
protože zapomínáme na most mezi prázdnotou a tím kdo na ni myslí

ale ona hledí na vlak bez čekání
zdraví ho
hlasem jasné svatojánské mušky
/rukou, jež nebude spřádat oprátky/
a vzpomíná:
krása má dost nesmrtelného času
zatímco uhání

vlak s pasažéry v srdci jejího pohledu

*******************

mira pasar un tren sin esperarlo
/en sus propios ojos reconoce
el paisaje -luz con que se moja lo escondido
el viento -sombra en la que silban los ausentes
y el aire -asombro en que palpita hasta el vacío

mientras los días se suceden pasan
con la indiferencia de los sueños que escupimos
olvidamos -trenes que pasan se suceden
caen-porque olvidamos
el puente entre el vacío y quien lo piensa

pero ella mira un tren sin esperarlo,
lo saluda
con la voz de una luciérnaga
/la mano que no va tejiendo sogas
y recuerda:
la belleza tiene el tiempo a su favor
mientras avanza

un tren con pasajeros en el corazón de esa mirada


_______
**poema perteneciente al libro 'Temblor' (2016, inédito)

miércoles, 24 de agosto de 2016

irreal

no...
yo no soy estas palabras.
yo no soy estas palabras como aire en la boca de mi fuego
/no me alimentan ni me tiemblan ni crepitan:
son una cicatriz del hielo que me muerde 
cuando existo.

Lo siento.
No soy estas palabras.
Ni siquiera he podido nunca ser un pájaro
/el color blanco es tan inalcanzable
como verme en la sonrisa de mi boca
como verme en las sábanas del animal que fuimos, que podríamos haber sido. 
No soy los pájaros blancos de este ahora que te dice
la sombra de los árboles o el candor
de las lenguas apagadas pero compartidas. 
Y tú tampoco /porque no nos compartimos. No hubo chance
/no podré llegar jamás a un sauce con palabras.

Estas palabras son tan sólo lejanía.
Y nunca quise tanta grieta.

he escrito para recordar que existo
y que tú también fuiste posible
antes de que me hicieras ser estas palabras.

Mi piel mi cuerpo los huesos de mi risa
están ardiendo. 
Ésa es mi única verdad
/la lejanía ahora aquí 
aquietando los verbos del vivir.



martes, 23 de agosto de 2016

entreLíneas***

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alguien querrá meterme entre dos líneas,
llevarme al filo del cuchillo/ el tiempo cercenando en su carnívoro silencio mi propia piel cansada o mundo 

pero mientras,
una cuerda de voz canta los pájaros que cantan mientras vuelan y también son línea y más/
la música debajo de los piélagos,
los cuerpos enterrados en la arena
están diciendo

están diciendo un horizonte amortiguado
pero los relojes se deshacen todavía
en la playa de alcohólica finura 
donde las cometas vuelan soplo de nostalgia.
________________________________________________________________________
(adiós, maldita línea, Adiós.)


***poema perteneciente al libro 'La cronología de los pájaros', (2016, aún inédito)

lunes, 15 de agosto de 2016

Pájaros de piedra

la estatua mordisquea el bosque de tu sangre
tan de lejos/ mírame
de cerca por favor de cerca
aunque una sombra de barrotes te aterrice /ponga
nombre cuerpo ahí dentro de ti
toda la duda, transatlántica
tú dentro de ti —tu corazón
lejano—

esta palabra tan de cerca
por favor de cerca vuelve a contestarte
con el rumor que avienta tu aleteo
aquí, dentro de mí
tus pájaros sin duda como pétalos que caen y gritan
música, un humo como un fósil que se queda
nada efímero tu arpegio de candor donde mi oído
tan de cerca fósil —nada efímero
el gorjeo derritiéndome la piedra en ti
en mi sangre ahora derritiéndose
de cerca... la música de las preguntas insalvables
siendo un mar más quieto después de la tormenta
dentro tú de mí —un mar de cerca

y sin embargo el tiempo está
piando la quietud, ¿verdad? un pájaro muriéndose
quizás para habitar el tálamo de todos los adioses, 
¿no es verdad que en tus espejos soy 
tan sólo un cuerpo un vómito de odio de interrogación
y el lugar siempre lejano,
el abrazo que no fue porque me pensaste en tu ceniza
y siempre la cuestión irresoluble de nunca estar mirándote
derretida en mí con la ternura de verte estar pudiendo?
¿Acaso no es verdad que nos seguimos observando
como pájaros de piedra en horizonte de quizás?




lunes, 8 de agosto de 2016

Conversación con el árbol Sombra (I)

No sé. No sé si entiendo bien eso que dices. Los lugares que yo habito nada tienen que ver con esas cuerdas o esas sogas o esas pequeñas muertes que, según dices, algunas personas se imaginan en ti. Me dices que no crees que quieran conocerte y es como si alguien pensara que tus manos llevaran cadenas afiladas o una piel como metálica, regueros de asfixias en tus dedos... algo así, un imposible en ti (porque con verte ya lo sé; y sí, te veo). 
Parece que esa gente está eligiendo el mundo con un velo de distancia entre los ojos. 
—Sí... Y yo sólo requería algún contacto, un dejar pasar el tiempo con la sensación de poder decir "otoño" sin estar sintiendo que también me estoy cayendo, no querer más durante tanto tiempo ése fugaz hiriente hueco, malditos pedacitos de vómito de miedo en mí, en la tripa o en el alma o en las palmas temblorosas de mis manos. 
Sólo quiero conversar como conversa el mundo. Nada tan fácil como eso. Un clic donde se enciendan —un poquito, tampoco demasiado— las horas donde no retumben los relojes henchidos de soledad absurda, demasiada absurda soledad inacabable. 
No me molesta estar tan solo. Pero aquí dentro —quizá tú lo sabes bien— hay como un impulso de raíces hacia fuera, un envite hacia la luz donde bucee algún deseo ya no en mí sino en lo otro. Otros ojos donde la voz sea como el mar cuando te escucha. Una playa, una vasta línea y un cuerpo ínfimo metido allí, tan vertical como el bastón de la esperanza.

los murciélagos*

todas las noches
los murciélagos —mi humo y los murciélagos—
y su gemido breve, hacia dentro como un mirlo
del revés. 
Mi humo es el grito de la soledad tan hacia dentro

todas las noches
los murciélagos, el grito y los murciélagos.
Me protejo en su nido,
soy el gemido breve que habla conmigo
tan hacia dentro siempre
como la soledad de espaldas

todas las noches
—no los grillos—
los murciélagos, la sombra y los murciélagos.
Se recorta mi humo en siluetas
de tiniebla/
son el cuerpo de los gritos
las variables formas del miedo —su mano
tapando mi boca la saliva
hacia dentro
como la soledad de espaldas

todas las noches
los murciélagos, la noche
el grito el humo
y los murciélagos
que gimen sufren
que vuelan vuelven
que gimen sufren más...

Pero cómo va a sufrir el humo —dices.

todas las noches
sufre el humo y no lo escuchas.
Todas las noches
los murciélagos, el humo grita y los murciélagos
me sufren /no lo escuchas.
sufre el grito en el cuerpo de mi humo,
de golpe caigo al nido del cigarro
—no lo escuchas.

Todas las noches
los murciélagos, el grito, los murciélagos y el humo
en mí
sufriendo. Hacia dentro
como la soledad de siempre.


_________
poema perteneciente a 'La cronología de los pájaros' (2016, inédito)



martes, 5 de enero de 2016

Ojalá. 2016

ojalá el paisaje compañía tibia
-no esta nieve
de mi huella efímera-

el paisaje manto blanco compañía tú
ojalá 
-no esta nieve de quejumbre
y su palabra aislada-



Luces

 
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