Hablaba con la puerta de cristal... me dijo que necesitaba
aire;
yo, dueño de la magia entorpecida de los primeros años,
golpeé
y el cristal saltó hacia mí entrándome en la carne del
cúbito o el radio
cortándome de tajo la magia entorpecida y ofreciéndome un
dolor incomprensible
comprendido ahora desde la cicatriz que requiere su propio
aire.
Quise ofrecerme una nueva puerta, llena de aire y de futuro...
-no tengo pulmones (dice la puerta, cerrada a sal de lágrima
y sin cantos)
Comprendo ahora que el ofrecimiento está lleno de heridas
/ellas tienen su propio tiempo, su propia arena de glóbulos
y sombras
y me ofrezco en el espejo como otra herida aún sin cicatriz.
1 Comentarios:
me encanta, empezando por el título y hasta el último verso
desde la cicatriz que requiere su propio aire
cerradas a sal de lágrimas y sin cantos
maravilloso!
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