lunes, 6 de junio de 2011

Flamanjazz.

(Para leer al ritmo de este temazo, lentamente)
(Banda Sonora de la descripción; necesaria)


           Flamenco Sketches suena de fondo, o más bien de superficie sobre la cual las letras caen como cae sutil la primera nota de Miles. Asordinando el tiempo en un momento, en un pedazo de metal, en un pedazo de letra. Todo se va llenando de humo, de un canto de bebé llorando por estar recogido en el feto inútil de la esponja, la esponja de este aire que ahora respiro; algodonado hasta que llega Coltrane y recoge la sangre del esputo triste del mañana. Destronando mitos con una pasmosidad a Tenor con su sensibilidad, lanzando y eligiendo aire para llegar a una cima de la que cae, a la que vuelve, de la que cae y vuelve como un yo-yo. Puf, LAzos, DOrmidos, REvolucionando SÍlabas, FAntasía. Bill Evans sostiene la pena con un acorde irrisorio como para ser toda una esperanza y sin embargo, siendo más que la esperanza. Siendo todo lo innombrable del abrazo que deja caer los párpados al otro lado del abrazo; siendo todo lo innombrable de la lágrima que llega a la boca como un caracol a su planta para morir seco, como la planta; siendo Adderley llegando con su saxito por mi cuarto para recordarme un solo triste que acaba tocando puntos álgidos de amor alegre con un feel sexy juguetón y apasionado. Culmen y culmen de la lágrima que se vuelve al ojo después de escuchar esto. 
Un marfil percutido en la cama de unas cuerdas de metal por un corazón y unas gafitas y un pelo de tazón medio caído tienen su turno. Sin espejismos ni adornos, el piano eructa a poquitos y piannisimos (y qué pianísimo!!) la entrada de la ballena herida, trompetística y tímida de Miles. Su timidez se desplaza por el agudo tiempo como un gato por la barandilla que une dos edificios de 200 metros: elegante, seguro de que va a pasar y apagando la llama de la muerte...acabando la escena apoyando la garra, la mano o el cuerpo entero en el contra-tiempo del contrabajo y en la sutil respiración de un splash que me da el aire necesario para descolocar la organización y jugar una vez más.

(Sesión de grabación del disco Kind Of Blue, 1959)

1 Comentarios:

Eva dijo...

muy bueno; muy sugerente.
una explosión sensitiva.

Luces

 
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